Close

La necesidad de un Plan de Manejo del río San José, en Arica

El río, que cruza toda la ciudad y el Valle de Azapa, es de régimen estacional. Por ello, su lecho tiene agua únicamente en verano, a consecuencia del invierno altiplánico. Durante el resto del año, en el período sin escorrentía, su cauce acumula basura, la que si no es retirada oportunamente irá a parar directamente al mar en la siguiente época estival. Para detener este ciclo, se hace urgente el desarrollo de un Plan de Manejo para el río San José.

Chile es un país costero. Quince de las 16 regiones del país coinciden con sus 6.435 km. de costa, y el ancho promedio del territorio es de 177 km., lo que hace que alcanzar sus playas sea relativamente accesible para casi toda la población.

Quizás por ello, la conciencia frente al cuidado de nuestro medio ambiente, y sobre todo de nuestra zona costera, se encuentra siempre presente en la toma de decisiones de la gestión local y nacional ―o al menos, así debería ser―. También por ello no es de extrañarse que diversos grupos, que van desde pescadores artesanales, agrupaciones ambientales hasta centros de investigación, ejerzan una constante protección del ecosistema costero. Lamentablemente, estas acciones nunca parecen ser suficientes.

Dada su extensión costera, el país presenta diversos sistemas hídricos compuestos por humedales, lagos, ríos y las desembocaduras de estos, que en la zona norte de Chile se caracterizan por ser de tipo intermitente, activándose durante un determinado período del año.

Un ejemplo de ello es el río San José, en Arica. La ciudad se encuentra irrigada por tres afluentes: el río Lluta, el río Codpa y el mencionado río San José. Este posee una longitud de 80.822 metros y nace en la cordillera, de la confluencia de los ríos Seco y Tignamar. El primero nace bajo la cota 3.500 msnm (metros sobre el nivel del mar) en un lugar que presenta precipitaciones escasas, lo que ocasiona que no tenga escurrimientos superficiales de manera permanente. En cambio, el rio Tignamar nace sobre los 4.500 msnm y recibe el aporte de quebradas cuyas fuentes ―situadas sobre los 4.500 msnm― receptan las precipitaciones de mayor importancia. Estas características hacen que el río San José posea un régimen intermitente o estacional, cuya presencia hídrica surge a consecuencia del invierno altiplánico durante la época estival. Es decir, su lecho solo tiene agua en verano.

El río San José recorre el principal valle de la comuna, el Valle de Azapa, y cruza por completo la ciudad. Paralelo a su cauce se encuentra la avenida Diego Portales, la que intersecta con otras importantes arterias que conectan la ciudad, con lo que es justo decir que el río es un carril biológico lleno de actividad y vida.

Pues bien, durante los meses en que está seco, el río San José se convierte en un vertedero ilegal. Esto representa un gran problema dada su naturaleza estacionaria, ya que a días de que baje su caudal desde los cerros, el lecho está lleno de basura. Incluso se pueden diferenciar tipos de basura según el tramo por donde el río fluye, por ejemplo: en el área urbana es posible observar, fundamentalmente, la presencia de residuos sólidos domiciliarios y escombros, mientras que en el área rural se observan residuos peligrosos y residuos orgánicos derivados de la actividad agrícola generada en el Valle de Azapa.

Como resultado, y debido a que es un río exorreico, es decir, que sus aguas logran desembocar en el océano Pacífico, los residuos acumulados llegan directamente hasta el mar, afectando a la Playa Chinchorro, una de las principales playas apta para el baño de la ciudad, con la consecuente contaminación del ecosistema marino.

Para reducir y mitigar la cantidad de residuos y, por ende, la contaminación que llega hasta la costa y mar de la ciudad, la Municipalidad de Arica, una vez al año y poco antes de la bajada del río, destina importantes recursos económicos para aportar en la eliminación de la basura a través de la contratación de una empresa especialista en el manejo de residuos.

Así, en noviembre de 2020 fueron retirados 236 m3 de basura, el equivalente aproximado a 20 camiones. Y durante el reciente mes de diciembre, la iniciativa logró la remoción de 200 m3 de residuos solamente en la zona urbana. Si bien en algo disminuyó la cantidad de basura retirada de un año a otro, la tendencia sigue repitiéndose, al punto que luego de unos días de su intervención, era posible encontrar basura nueva en el cauce del río.

Por lo anterior, es primordial generar un Plan de Manejo que plantee una solución a largo plazo, en donde se restrinja la ocupación indebida del cauce y se concientice a la población respecto de la mantención y cuidado del mismo, además de promover la multifuncionalidad del río en períodos sin escorrentía, generando espacios públicos que promuevan el esparcimiento, la recreación e incluso contribuyan a la conectividad y descongestionamiento de la ciudad mediante la construcción de vías para medios de transporte relevantes en la movilidad urbana, como bicicletas, patines y monopatines eléctricos, entre otros.

Ingresa a tu cuenta aquí

Geógrafo, Magíster en Ciencias Ambientales. Presidenta de la Agrupación Observadores de Aves de Arica y Parinacota, Secretaria Comité Ambiental Comunal de Arica

Deja un comentario

Leave a comment
scroll to top